miércoles, marzo 29, 2006

Conversaciones

Seak dice: por la referencia..a mi, y a estos momentos de nuestra vida...No se, nunca estuve en el inicio de alguien, es más, creo que muy pocos me aludieron en algún lugar....es como la síntonía del cambio DeVueLT@ dice: si, es que tampoco creo que la gente tenga conciencia de los principios ni de los finales DeVueLT@ dice: yo soy conciente de que "te fuimos a buscar" y a partir de ahí empezó algo distinto para vos y que cuando "nos fuiomos para allá", algo para mi iba a cambiar y cambió DeVueLT@ dice: aparte la coincidencia del final y el principio del camino del heroe en el mismo momento DeVueLT@ dice: vos volvias a la aldea y yo partia a la aventura DeVueLT@ dice: al mismo tiempo DeVueLT@ dice: eso no se da siempre, casi nunca por ahí DeVueLT@ dice: pero nosotros lo vivimos Seak dice: si, tal cual, ahoar está esta cuestión de jugarse no? DeVueLT@ dice: claro, ahora viene la parte en que probamos que aprendimos, que mutamos y cambiamos, que ya no somos los mismos y salimos al mundo a comer de él. DeVueLT@ dice: subimos un par de escalones en la piramide alimenticia, calculo

Para Diego

El otro día me paré en el medio de la pieza y miré la pared que ahora tiene el estante con los cedes y el corcho que hice colgar, para pegar fotos de amigos que creía tener. De pronto vi dos estantes con hileras de casetes, sobre una cama marinera de madera color amarilla. El colchón de arriba estaba cubierto por un cubrecama de una tela extraña de color turquesa, y la cama de abajo con un cubrecama del mismo material de color verde esmeralda oscuro (el turquesa era en realidad vermillón). Un pequeño equipo doble casetera de marca famosa en Ciudad del Este... momento, esa radio es de mucho más atrás en el tiempo. Ahora estamos en la misma pieza, pero los colchones están apilados en el suelo, hay una alfombra estilo ¿persa?, en el suelo, y ese mismo equipo escupe “love is a shield” de la banda Camuflage, la FM es Z95. Hay posters de la 13/20 en las paredes. Vos con un martillo en la mano haces la mímica del cantante y yo con una raqueta hago que toco la guitarra. Me quedé un ratito mirando ese recuerdo, sonreí, me di vuelta, y me traje el recuerdo, el flashback, que me trae felicidad. Y me recuerda por qué sos grosso. Love Rodrigo, tu hermanito más chico

jueves, marzo 23, 2006

Porque a mi generación algo le pasa

Si vez a una persona de 60 años con una remera de Miranda, la imagen hace ruido; si escuchas a una banda de tipos de treinta y pico haciendo temas adolecentes te da cosita; ¿que pasa si vez una película de un tipo entrado en años, que te habla a vos, o mejor dicho, a tu generación? A mi me dio miedo.
Match Point es la última película de Woody Allen, que menos se parece a Woddy Allen. La peícula está filmada en Inglaterra, el no aparece en ningún momento, no habla de religión, no hay chistes, no hay referencias religiosas cómicas. Solo una historia.
Al principio de la película vemos como una pelota de tenis pasa de lado a lado de la pantalla y se pierda por sus extramos, por sobre una red de tenis. La pelota golpea la red, sube y se detiene. Una voz en off nos aclara que la suerte es la diferencia entre que la pelota caiga del otro lado y ganes el partido o caiga de tu lado y lo pierdas.
Chris Wilton (Jonathan Rhys Meyers) es un instructor de tenis, que supo jugar con los grandes en los grandes circuitos, pero que dejó su sueño atras porque nunca fue tan bueno. En un exclusivo club de campo inglés conoce a Tom (Matthew Goode), un pibe de mucha plata, lindo y carismático, que lo invita a pasar una noche en la opera con sus paders. Chris conoce a la hermana de Tom, Chloe (Emily Mortimer), que queda enamorada de Chris al instante. Van un día a la casa de campo de ellos, y alli conoce a Nola (Scarlett Johansson), una aspirante a actriz norteamericana, más buena que comer pollo con la mano, y que se la quiere curtir al instante. A partir de ese momento, un espejo se planta delante del espectador y comienza a ver muchas cositas. Los personajes no tienen más de treinta años, si no medio lustro más jóvenes. Las cosas que les pasan no las buscan, las que buscan no son las "correctas", no se juegan por nada, y cuando se juegan es para hacer cagadas.
Lo interesante de esta película es el constante "tono medio" de los personajes. Las acciones dentro de la película pasan a la velocidad de un set de tenis. Pequeños segmentos donde ocurren cosas, y los personajes están ahí. Chris acepta todo lo que le llega, no cuestiona, solo vive ese momento sin hacer olas. Pasa de promesa del tenis, a instructor de viejos, a oficinista pete, a empresario exitoso sin demasiado esfuerso, pero sin tener en claro que es lo que quiere. ¿Rings any bell?
Se casa con Chloe, una chica rica burguesa, que lo único que quiere es tener un hijo, pero que para entretenerse monta una Galería de Arte. La obseción por un hijo se vuelve una carga para Chris, alentada por una epidemia de embarazos en el entorno de Chloe. Tom está comprometido con Nola, vive con ganas de enfrentarse a los mandatos paternales, pero por si acaso se casa con otra mina. Nola decide refugiarse en el alcohol para no lidiar con las frustraciones que le produce su carrera. Y nadie hace nada para cambiar nada, todos avanzan hacie quien sabe donde, pero a priori lo que hacen está bien. Chris deja la raqueta por el traje y crece en una compañia en la que se siente claustrofóbico, se casa con una mina que le cierra, pero está enamorado de Nola, de la que en realidad está obsecionado.
Constantemente se ve la apatía de ¿mi generacíon?, que tranquilamente es la misma que la de la generación anterior, y la de la anterior, y de la que nos sigue. Miramos hacia todos lados, pero elegimos las opciones más cómodas. Frente a la posibilidad de vivir de lo que uno quiere, se elige el traje y el chofer. ¿Pero que es lo que uno realmente quiere? Nadie se pregunta que quiere en ningún momento, solo acepta lo que llega, no lo cuestiona ni lo vive (ahora que lo pienso mejor). Me parece por lejos una de las películas más interesantes de Woody Allen, o por lo menos la que más me llegó. Y es un interesante "llamado de atención" a todos los que nos quejamos de la vida, pero que en ningún momento empezamos a vivirla.

lunes, marzo 13, 2006

Un viaje que termina en esta foto y otro que empiza ahí mismo. Es increible, las veces en que nos permitímos el placer de la incredulidad, que tanto pase en una sola foto, de una sola persona. Ella es una amiga, que hace una semana empezó una vida distinta, y me siento orgullosos de haber sido parte en ese principio. Cuando ella volvío hacia su mDq, yo partía hacía lo que me gustaría conciderar el primer viaje del resto de mi vida... ¿nucho drama? Mi cerebro despertó honesto esta mañana, perseguí a mi mujer a los besos por calles que en Buenos Aires me darían miedo, hablo con gente extráña con la que no se si hablaría en otra situación. Hoy vencí un miedo y exibí mi corto ante una audiencia que "sabe" como mirar una película, y le fué bien. Hubo aplauso, hubo risas... pero para no mentirme a mi, por el tema del problemita de mi cerebro auto proclamado honesto, la única que dijo algo fue una chica que se llama Rosario, y que por los cortos que ví de ella y que me gustaron muchísimo, era alguien a los que sabía que le iba a gustar. Y ahí estoy yo de nuevo, pensando en que le gusta por compromiso. Mi cerebro tiene una unidad independiente que cuenta con una importante red de autodestrucción masiva de la personalidad. No puedo aceptar que le guste a la gente, no puedo haceptar que no le guste a la gente. Algún día me pondré ser humano, y tal vez muera ahí mismo.

domingo, marzo 12, 2006

Album de Fotos

Antes de salir para Alternativ@

divas Post fiesta